La Comisión Europea trabaja en una nueva directiva para crear una base común del Impuesto de Sociedades en Europa para el conjunto de los 28 países miembro que forman la Unión Europea. A continuación explicamos los diez puntos y datos fundamentales sobre este plan.
1. Evitar que grandes empresas se beneficien
El objetivo es evitar que grandes empresas y multinacionales salgan beneficiadas de la ingeniería fiscal y de determinados vacíos legales entre las distintas legislaciones nacionales.
La intención es impedir que no solo se libren de pagar el Impuesto de Sociedades en Eruopa en muchas ocasiones, sino que se desgraven un mismo concepto en dos países distintos. Además, el objetivo es suprimir la competencia desleal entre las distintas haciendas nacionales, fomentando así una mayor transparencia europea en fiscalidad.
2. Fijar unas reglas comunes
El objetivo no es crear un tipo único compartido por los 28 Estados miembro, sino fijar unas reglas comunes para todos ellos. Es decir, igualar las tasas de depreciación o que los mismos activos puedan deducirse en todos los países.
3. Directiva obligatoria
La directiva sería de obligado cumplimiento para empresas con facturación mayor de 750 millones de euros.
4. Aumento de inversión
Según datos de la Comisión, la inversión incrementará más de un 3% con el desarrollo de estos criterios comunes para calcular la base imponible. de esta manera, se permitirá que la creación de una nueva filial en otro Estado miembro le cueste a cualquier gran compañía 2/3 menos.
5. Tipo de gravamen
Los Estados miembros podrán seguir definiendo el tipo de gravamen.
6. Crecimiento de empleo
Por otro lado, la propuesta de la Comisión Europea (CE) augura un crecimiento del empleo de un 0,4%.
7. División del proyecto
La Comisión Europea ya intentó en 2001 y en 2011 un plan de acción de estas características que fue rechazado por ocho parlamentarios. No hay que olvidar que para la puesta en marcha de esta normativa necesita de la aprobación de todos los parlamentarios.
Debido al fracaso de los proyectos anteriores, la Comisión Europea ha optado por rebajar sus ambiciones y dividir el proyecto en dos fases que se aplicarían gradualmente.
8. Primera fase
La fecha de aplicación de la primera fase de esta nueva norma sería 2020. El objetivo de esta primera fase consiste en armonizar la base imponible del Impuesto de Sociedades en Europa, para que se calcule con arreglo a los mismos parámetros en todos los países de la UE.
9. Segunda fase
La segunda fase implica el cálculo de base imponible por parte de cada empresa, tras la suma de beneficios y pérdidas, que será dividida entre todos los países donde opere la entidad mercantil, para conocer la base imponible sometida a imposición en cada uno de los países.
10. Fórmula de reparto
El dossier señala que la fórmula de reparto de todo lo recaudado a través de este Impuesto de Sociedades en Europa será un índice creado a partir de criterios como mano de obra, ventas o activos de las compañías. También se prevé una rebaja de la fiscalidad para pequeñas empresas y las start-up que inviertan en innovación.